y tu sonrisa una chispa de limón.
No sé si ése era el sabor de tu voz
o sólo la publicidad de tu sombrilla.
Corrías descalzo entre las rocas
en busca de tesoros que la mar
aún no se había tragado:
anzuelos, cebos, cañas rotas.
No atesoraban más valor
que el hecho de encontrarlos.
Han pasado ya diez años
y aún te busco en esa playa.
Foto: Playa Cruz del Mar, Chipiona, Cádiz, planeta Tierra