miércoles, 30 de enero de 2013

Capítulo 2: De cómo regar un amor

Quisiera ser una flor
para no necesitar nada
mas que la luz de tu mirada,
el agua de tus besos,
la sal de tu sudor,
y el CO2 caliente
de tu respiración.

No sé qué es esto
que me recorre por dentro.
Será mi savia
que, al ser tan sabia,
nunca miente.

Y sin quererlo
me convertí en flor.

Así es el amor.

3 comentarios:

  1. Hermoso canto de amor...y fantástica metamorfosis...Eso solo lo hace el amor...besos

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  2. Respuestas
    1. Tienes razón! Querer quería! Quizá debería cambiarlo a "y sin saberlo"?? Tú qué opinas maestra?!

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